martes, 29 de septiembre de 2009

Sobre el proyecto de 11 minicentrales en el río Ésera y la necesidad de unir esfuerzos contra las amenazas al futuro de la Montaña

Volviendo a las amenazas que se ciernen (mejor sería decir acumulan) sobre nuestro territorio, nos hemos enterado recientemente del proyecto de creación de 11 minicentrales que amenazan al río Ésera y suponen un nuevo planteamiento del antiguo proyecto de embalse de Santaliestra, camuflado ahora bajo la división y dispersión de los distintos proyectos y un discurso que pretende vender esta nueva agresión, que destruiría uno de nuestros últimos ríos relativamente vivos, como "ecológica" y "sostenible".
A propósito de este asunto (para quienes quieran conocerlo en profundidad y para quienes deseen unir sus fuerzas contra él) se ha creado en facebook un grupo al que desde aquí os remitimos:


Pero como decíamos al principio, y hemos reiterado en ocasiones anteriores, el verdadero problema que tenemos es la continua acumulación de amenazas sobre la Montaña, territorio históricamente explotado bajo un modelo colonialista en el que sólo interesa la explotación de los recursos, prescindiendo de las gentes (o contando, claro está, con que su escasez hace rentable en términos electorales la explotación). Como muestra de hasta qué punto de desfachatez llegan las empresas que así han tratado y tratan nuestro territorio (como auténticas mafias) vale la reciente noticia en torno a la posibilidad que ENDESA ofrece a los antiguos habitantes de los lugares expropiados (brutalmente) para el nunca construido embalse de Jánovas. Ahora resulta que si quieren recuperar lo que literalmente les robaron (el tiempo ha demostrado que la causa de expropiación no fue real) les exigen un pago de entre 25 y 30 veces el valor de los terrenos. ¡Qué decir ante semejante atropello! En fin, os dejo, al respecto, con un artículo magnífico aparecido en zaragozame, cuyas opiniones compartimos plenamente (especialmente las vertidas en algunos de los comentarios que proponen denunciar a ENDESA por lo que, en definitiva, no es más que una inmensa estafa).
Todo lo anterior nos ha llevado a pensar en estos días en la necesidad de unir esfuerzos y crear una gran plataforma que aglutine a las distintas asociaciones de vecinos, colectivos, plataformas, etc. que luchan cada una en su lugar contra las amenazas que hacen cada vez más inseguro el futuro del medio rural en la Montaña aragonesa. Y no sólo por aquello de que la unión hace la fuerza, sino porque es hora ya de que la sociedad civil deje de asistir impotente a una situación de inseguridad jurídica y colonialismo que, contrariamente a lo que dicen los que pregonan las virtudes de sus proyectos de explotación del territorio, deja en entredicho el futuro de las gentes y lugares del Alto Aragón, privados poco a poco de su patrimonio natural, su mejor recurso económico. Al respecto, personalmente, creo que el modelo para esta gran Plataforma debería ser el del grupo de afinidad (en la línea de las propuestas del Colectivo Temporal Crisis, de las que os hablábamos el pasdo 17 de septiembre) o bien el de un Foro Social, o sea, en cualquier caso, una apuesta por crear una nueva sociedad que de manera autónoma luche por su vida y sus recursos al margen de las instituciones, dejando atrás por obseleto y antieconómico el modelo capitalista-"democrático" que nos ha llevado a la crisis y a la destrucción del medio natural.

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